HAINA, SAN CRISTÓBAL. Considerado el primer relleno sanitario del país, con los estándares de calidad y garantía medioambiental, el de Haina se proyecta como el inicio de la solución al problema de los desechos sólidos del Gran Santo Domingo, San Cristóbal y sus municipios, de acuerdo con sus mentores.
La obra que construyen las empresas Tratamiento de Residuos Sólidos (Tresa) y la firma internacional Mota Engil, de capital portugués, se levanta en principio en 13 hectáreas, de un total de 65 en la localidad Naranjal del municipio Haina.
Bruno Cid, representante de Mota Engil Dominicana, explica que tienen más de 70 años construyendo infraestructuras y 21 años relacionados con la conservación del medio ambiente, y en la actualidad tienen 126 proyectos de infraestructuras y de energía asociación al tratamiento de residuos sólidos.
Lamenta que se haya suspendido la licencia ambiental 0296-15, otorgada por la administración del exministro de Medio Ambiente, Bautista Rojas Gómez, a solicitud del Consejo para el Desarrollo Integral de Haina.
Cuenta que el proyecto está paralizado desde agosto del pasado año, a pesar de que se ha hecho una inversión de US$5 millones, cuyos materiales ya fueron importados y están en un almacén. Indicó que como extranjero e inversionista se le hace difícil entender el rechazo de algunos sectores.
“En 70 años que tenemos, no hemos tenido nunca problemas y no es ahora que lo vamos a tener, lo que queremos es que nos dejen trabajar con lo que tenemos que cumplir, que nos fiscalicen, que haya normas rígidas, porque eso nos gusta, pero que no nos suspendan la licencia”.
Insistió en que es un área que conocen, y que se trata de un proyecto que se puede replicar en otras partes del país.
La suspensión
El 10 de agosto de 2016, el Ministerio de Medio Ambiente dispuso la suspensión precautoria de la licencia para el relleno sanitario, a solicitud del Consejo para el Desarrollo Integral de Haina, que alega posible contaminación con la finalidad de que las partes “socialicen la situación en función de los mejores intereses”.
Francisco Flores Chang, director de Residuos Sólidos de Medio Ambiente, dijo que como la objeción a los trabajos la hacen pobladores, llamarán a una audiencia pública superior a las vistas públicas.
“Fue una visión que tuvimos nosotros de que en San Cristóbal hay unos pasivos ambiental de mina, que han perdido la capa vegetal y nosotros presumimos que eso sirve exclusivamente para un relleno sanitario.
El rechazo
El Consejo para el Desarrollo Integral de Haina, al igual que parte del sector industrial rechazaron la construcción, alegando que no quieren basura de otros lugares. Víctor Manuel Báez, presidente de la entidad, dijo que se pretendía llevar 4,000 toneladas diarias de basura del Gran Santo Domingo.
“Eso implicaría que alrededor de 800 volquetas y camiones se movilizarían a Haina”. Por su lado, el alcalde de Haina, Osvaldo Rodríguez, dijo que no está de acuerdo con el relleno, porque no está muy claro, y es objetado por la comunidad. Precisó que no se les ha dicho si también se les cobrará la basura, pero tampoco favorece que se lleve basura de otros lugares.
